Médico salva la vida a mujer en pleno vuelo de la CDMX a Miami

Un incidente de asfixia a bordo del vuelo 421 de Aeroméxico con destino a la Ciudad de México se convirtió este domingo en una historia de heroísmo fortuito, cuando un cirujano mexicano salvó la vida de una pasajera que se atragantaba con una botana. El doctor Pablo Orozco Obregón, cirujano general y gastroenterólogo del Centro Médico ABC, quien viajaba en el asiento 15 B, reaccionó de inmediato al ver que María Gracia Parra, una psicóloga venezolana residente en México que ocupaba el 15 D, se asfixiaba cerca de las 20:30 horas. La causa del incidente fue la ingesta de unos Chetos, cuyo «polvito», según explicó el médico después, generó un cierre temporal de la tráquea de la pasajera. Sin dudar, el doctor Orozco Obregón, graduado de la Universidad La Salle y miembro del Consejo Mexicano de Cirugía General, aplicó la maniobra de Heimlich de manera oportuna a 37 mil pies de altura.  

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Sale de la cárcel presunto asesino de Mateo y agentes ministeriales lo esperaban ya para llevarlo a prisión

Al ser este día dado de alta el doctor Cristian Augusto Jafet fue trasladado a las instalaciones de Prevención Social para ser llevado ante un juez de Oralidad Penal para iniciar su proceso legal. El mediodía de este martes el Dr. Cristian Augusto Jafet Gómez Villalpando, fue dado de alta en el hospital General Regional de León, policías ministeriales lo esperaban para detenerlo y trasladarlo a Prevención Social como presunto asesino del niño Mateo Santiago Ramírez Martínez de 12 años. De acuerdo a versiones que circulan, policías ministeriales habían quedado de acuerdo con el presunto asesino un día después de la denuncia de la desaparición del niño, presentada por sus padres; al parecer los agentes ministeriales habían quedado de acuerdo que acudirían al consultorio a revisar las cámaras de seguridad del lugar sin embargo el presunto nunca acudió. Los agentes presuntamente le estuvieron haciendo varias llamadas a Gómez Villapando las primeras las contestaba y les aseguraba que estaría en el lugar dándoles varios horarios hasta que finalmente dejó de contestarles. Ante esto los policías acudieron al domicilio en cuyo interior se encontraba el presunto asesino del niño, luego de amenazar a los agentes e incluso dispararles. Posteriormente se dio dos balazos que no representaron ningún riesgo a su vida.

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