Mientras la rapiña se agudiza los habitantes de Acapulco pese a las promesas oficiales continuan en la desesperación ante la falta de alimentos, agua, energía eléctrica.
El paso del huracán Otis, dejó cifras oficiales27 muertos y cuatro desaparecidos aunque ciudadanos señalan que hay muchos más fallecidos y los cadáveres se encuentran todavía entre el lodo, los árboles, ramas, basura que bloquean todavía las calles.
Una población de más de un millón de personas sin noticias de sus familiares incluso en el mismo Acapulco,la rapiña se intensifica, no hay autoridad.