Es la primera causa de ceguera irreversible a nivel mundial.
El glaucoma es la primera causa de ceguera irreversible a nivel mundial. Esta enfermedad es un grupo de neuropatías ópticas caracterizadas por cambios en el nervio óptico como amplitud de la excavación que corresponde a patrones de pérdida visual. En la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) Hospital de Especialidades No. 1 Centro Médico Nacional Bajío (CMNB), del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en León, son atendidos pacientes con dicho padecimiento.
“El nervio óptico es el encargado de enviar la información visual del ojo al cerebro y es vital para tener una buena visión. El glaucoma de ángulo abierto es el tipo más frecuente de esta enfermedad”, señaló la doctora Ivett Rojas Candelas, jefa del servicio de Glaucoma, de la unidad.
Explicó que los factores de riesgo importantes para desarrollar glaucoma primario de ángulo abierto son la edad, raza, antecedentes familiares, miopía y aumento en la presión intraocular, entre otros.
Indicó que la ausencia de síntomas en las etapas iniciales de la enfermedad es para tomar en consideración, ya que el efecto es muy gradual y las o los pacientes no notan cambios en su visión hasta que la afección llega a etapas avanzadas. Por ello, es importante que la población reciba revisión anual a partir de los 40 años o antes en caso de que familiares directos hayan padecido glaucoma.
Comentó, esta afección visual llega a afectar la calidad de vida de las y los pacientes en diferentes aspectos como: disminución de la función visual, aumento de la prevalencia e incidencia de depresión, caídas, accidentes de tráfico, fracturas de cadera y un mayor grado de dependencia.
Destacó que en la UMAE No. 1 a las y los pacientes con glaucoma se les ofrece desde tratamientos médicos, hasta cirugías y actualmente se está en proceso administrativo para implementar tecnología como el llamado iStent inject W
para realizar cirugías mínimas invasivas que permiten una más pronta recuperación de las y los pacientes aminorando los riesgos postquirúrgicos.
Este dispositivo pertenece a las conocidas, como técnicas Minimally Invasive Glaucoma Sugery, por sus siglas en inglés (MIGS), útiles para lograr una reducción eficaz y segura de la presión intraocular; es una nueva generación en tecnología que mide 360 micras que genera nuevamente el flujo natural del líquido acuoso evitando la hipertensión ocular para evitar daño en el nervio óptico, y es una opción para pacientes con glaucomas leves a moderados, para que no se generen afectaciones secundarias a largo plazo.
Al momento de su implementación, que se pretende sea el próximo año, permitirá disminuir o eliminar el uso de fármacos en pacientes, así como evitar ciertos riesgos inherentes a las cirugías que actualmente se emplean.